Descripción

En aplicaciones de refrigeración y congelación de alimentos el dióxido de carbono (CO₂) se utiliza como agente criogénico para eliminar el calor, controlando de forma económica y precisa la temperatura tanto del producto como del proceso. En Envasado en Atmósfera Protectora (EAP) se usa para conservar la calidad y prolongar el tiempo de conservación. También se aplica CO₂ para lograr una carbonatación y sabor uniformes en la producción de bebidas alcohólicas y no alcohólicas, así como para optimizar la productividad en las líneas de embotellado y envasado. El CO₂ puede ser una forma eficaz de potenciar el crecimiento y reducir los daños en los cultivos de los invernaderos, y es una alternativa más segura y económica que los ácidos y productos químicos en aplicaciones de tratamiento de aguas, en plantas de pulpa y papel, operaciones industriales e instalaciones de tratamiento de aguas municipales. El CO₂ también se utiliza habitualmente como gas protector en aplicaciones de soldadura y metales.